16/12/13

Mirar lo positivo.

Buenos días!
Si, lo se, he estado más perdía ''quel barco larroz'' (así es como suena cuando se dice rápido y en andalú XD, el barco del arroz, es muy fino), pero estoy en unas semanas que no doy a basto con el trabajo, y todavía me quedan unos cuantos días, pero no podía dejar más tiempo sin escribir este post.

No me acuerdo (momento Dori) si alguna vez os he comentado que este año 2013 no ha sido  muy buen año para mi, es más, estoy deseando que termine. Este año era supuestamente un año de cambios para mi. Afrontaba de nuevo unas oposiciones para conseguir uno de mis principales objetivos, poder por fín trabajar en un colegio como maestra, pero no salió la cosa bien y provocó en mi una caída en picado.

Llevo 5 años trabajando con niños. Empecé como monitora de aula matinal y actividades extraescolares. Por aquel entonces tenía 21 años, terminando mi carrera de magisterio y flipaba en colores. Me sentía muy realizada en mi trabajo, pues era lo más próximo a mi sueño, trabajar como maestra. 

Dentro de la empresa ascendí a coordinadora a los dos años. Año de preparación de oposiciones. Le dedicaba mucho tiempo al cole ya que me tenía que hacer a las nuevas responsabilidades y yo soy muy ''apretá'' y no quería cometer error. No le dediqué el tiempo que requiere a unas oposiciones, pero me iba tan bien en el trabajo que eso lo suplía. 

Aprobé esas oposiciones pero sin plaza. Pero me decía a mi misma: ''bueno Laura, no te agobies, tienes 24 años, eres joven y dentro de dos años vuelves a tener la oportunidad, 26 años es una edad muy buena''.

Me volvieron a ascender, llevando una zona de ventitantos colegios, un agobio descomunal y que al principio quería morirme y abandonar porque era demasiado volumen de trabajo, pero conseguí coger al toro por los cuernos. Una nueva satisfacción en mi vida laboral, iba viendo fruto.

Al año siguiente se quedó una vacante libre como coordinadora en el cole donde empecé a trabajar de monitora. Pensé que me vendría bien no llevar tanto volumen de trabajo y así poder dedicarme mucho más a las oposiciones. Y así fue.

¿Sabéis cuál es la sensación de tener que dar un paso más en la vida? Pues ese año (a partir del año pasado) me sentía así. Había aprendido muchísimo en mi trabajo, pero necesitaba ya despegar y poder trabajar en lo que realmente quería. Me tomé ese año como el ''último'' de mi trabajo para comenzar en otro nuevo, hasta me pedí una excedencia de dos meses para dar el último tirón al estudio. Si, este era mi año, 2013.

Llegó el día del examen.Deciros que se me saltaron hasta las lágrimas cuando escuché la segunda bola ,''Tema15'', mi tema.  Y llegó el día en el que dieron los resultados, ese maldito día en el que me enteré que no pasaba a la segunda parte que era mi fuerte, el oral, la parte en la que te luces en unas oposiciones. Me presenté hasta en otra provincia para ser única en mi tribunal, pero me quedé con las ganas, tanto esfuerzo...para nada.

Se me vino el mundo encima, incluso hasta hace poco, no empecé a quitarme las piedras de esa mochila que desde Julio cargaba todos los días. Seguí en el cole donde estaba, con mi puesto de coordinadora, pero no era lo mismo. No me veía en Septiembre allí. Me veía entre los pasillos, decorando mi aula, preparando material...

La gente me decía: ''Bueno Laura, al menos tienes trabajo en los tiempo que corren, parecido a lo tuyo, mira lo positivo...'' Pero a mi esas palabras, me entraban por un oído y me salían por el otro. Estaba de bajón, desilusionada, triste, hasta de mal carácter. Ver como yo seguía estancada en lo mismo, y gente de tu alrededor avanzaban en lo suyo, lluvia de ofertas, vacantes en centros, contratos en colegios privados, y yo que eché más de 100 currículums, nada.

Pero ¿sabéis qué? que esto me ha servido coger más fuerzas para las próximas. Si, es cierto, no estoy trabajando como maestra. Pero hoy por hoy me siento satisfecha y realizada con el trabajo que hago.Veo como mis alumnos, tanto en el colegio, como las clases particulares, van avanzando con mi trabajo y eso, es una de las mayores satisfacciones. 

Así que, en parte, creo que le tendré que dar las gracias a este 2013, por darme la actitud de querer darle un giro y  nuevos rumbos a mi vida. 

Aunque haya días que cueste, levántate con una sonrisa y de cada cosa que pase, sácale el aprendizaje :). Buenas noches!





6/12/13

Viernes Musical

Buenos días! aquí os dejo un vídeo muy especial con una canción que me llegó al corazón y que cada vez que la escucho me sigue tocando el alma.

Espero que la disfrutéis :)


4/12/13

Mi gran pasión

Quiero dedicarle este post al señor Wert, ya que ha demostrado ser un inconsciente por realizar una ''matanza'' a la enseñanza musical, dando la opción a las comunidades autónomas y a los centros de ofertarlas o no, y de ser ofertadas se elegirían como una optativa.

Si, y lo digo con la boca llena, la música es una de mis grandes pasiones, hasta me atrevo a decir que no podría vivir sin ella. ¿Hay alguna persona en el mundo que no escuche música? ¿Hay alguna persona en el mundo que no la haya utilizado como vía de escape?
Mucha gente no es consciente de la importancia que tiene. Los que me conocen dirán: ''¿Y tu qué vas a decir siendo maestra de música y pianista?. Si, lo reconozco, soy una friki de la música y eso que he tenido una relación amor - odio con ella (o más bien con mi instrumento). Pero ¿sabéis qué? QUE ME ENCANTA SERLO! Y me encanta que mis amigos y mis familiares vean cosas de música y yo les venga a la mente, que me relacionen con ella.

Como comentaba antes, mucha gente no sabe de la importancia de la música y los ''poderes'' que tiene para la vida. Pues bien:
  • Crea aprendizajes acelerados y significativos en áreas como el currículo escolar, el funcionamiento empresarial y el desarrollo humano general.
  • Incide en el manejo de problemas, en el manejo de las emociones, en el desarrollo de la inteligencia, en la integración de equipos, en la creatividad e innovación, entre otras muchas cosas
 Es beneficiosa ya que: 
  • Reduce el dolor. Cuando escuchamos música liberamos endorfinas que actúan como analgésicos naturales. Ayuda a aumentar la felicidad y a reducir la depresión.
  • Aísla el estrés. Escuchar media hora de música suave, aunque sea dos veces por semana, reduce significativamente los niveles de estés y ansiedad.
  • Refuerza la salud. Escuchar música suave también ayuda a reducir la frecuencia cardíaca y la presión arterial.
  • Estimula el cerebro. La música con ritmos fuertes hace que la concentración permanezca más aguda y los pensamientos más alerta. Escuchar música suave, en cambio, mejora la capacidad de concentrarse durante más tiempo aunque ésta haya acabado.
  • Aumenta el rendimiento. La música no solamente elimina la sensación de fatiga, cansancio y aburrimiento sino que actúa como un estimulante que aumenta la productividad.
  • Facilita el sueño. Escuchar música de baja frecuencia induce a la relajación y facilita y mejor el sueño.
  • Aumenta el optimismo. Puede ser usada para trasladarnos a un estado de ánimo mucho más positivo. Gracias a la música recordamos momentos felices, pero también aumentamos la autoestima y la confianza en nosotros mismos.
  • Hace de medicina emocional. Otro de sus múltiples beneficios es que cuenta con las virtud de cambiar el ánimo de una persona rápidamente y ayuda a tener autocontrol, mejora el poder de seducción y vence la timidez.
  • Invita a socializar. La música une a personas que comparten una pasión similar. Ayuda a conocer gente nueva, a hacer vida social y a unir grupos.
  • Ayuda a meditar. Está demostrado que dedicar unos minutos al día a la música de baja frecuencia es una de las mejores técnicas de relajación que existen.
Además, mamis y papis:
  • La música favorece en su desarrollo intelectual, motriz, auditivo, sensorial y de habla.
  • El niñ@ que vive en contacto con la música aprende a convivir de mejor manera con otros niños, estableciendo una comunicación más armoniosa.
  • La etapa de la alfabetización del niñ@ se ve más estimulada con la música a través de las canciones infantiles
  • Ayuda a la concentración, el aprendizaje de las matemáticas (ya que la música son matemáticas puras) y facilita el aprendizaje de otros idiomas.
  • La expresión corporal del niñ@ se ve más estimulada.
Querido señor Wert, solo le deseo que le estallen los oídos cada vez que oiga una sola nota musical.

2/12/13

El paso del tiempo

Muchas veces, mientras estoy en el trabajo o de charlas con mis amigas, nos paramos a pensar en lo pronto que pasa el tiempo y realmente me asusta un poco. Siempre pongo el mismo ejemplo: ''pero si parece que fue ayer cuando hice la comunión o empecé la facultad''
Tengo 26 años  y siempre me habían dicho: ''cuando lleguen los treinta se pasará el tiempo volao'' :|. ¿¿¿Los treinta??? pero si me quedan solamente cuatro años para llegar a esa edad y para mi eso es poquísimo tiempo, rápido se me está pasando ya.

Cuando eres pequeña, ves las cosas muy lejanas. Estás en el colegio y piensas ''ufff todavía me queda mucho para llegar al instituto''.  El tiempo pasa muuuyyyyy lentooooooo. Me acuerdo que los veranos se me hacían eternos, cumplías años, 8, 9, 10, 11, 12 y tu vida como que no avanzaba, solo pasabas de curso en el colegio y en el conservatorio pero tu vida seguía siendo la misma y decías ''cuando vaya al instituto.....'' y el pensamiento se quedaba ahí furulando cual pajarito de pensar como sería aquella época.

 Llegas al instituto con mucha ilusión (en mi caso fui la última generación que llegábamos al instituto en 3º de ESO) pero sigues pensando ''jolín, todavía me quedan aquí cuatro años más'', pero vives las cosas algo diferente, empiezas a fijarte en chicos, pasas la horrorosa pubertad, empiezas a salir algo más, te pintas la raya blanca pa ir al cine y al burguer king con tus 15 amigos más del grupo (en mi época se llevaba la raya blanca), vas cumpliendo los 14, 15, te entra el gusanillo de salir de discoteca e intentas pasar sin que te pidan el DNI, tu mu puesta con tu raya blanca y los dos mechones tiesos en el flequillo (lo que se llevaba antes) pa intentar aparentar los 16 y te dejen entrar...Pero seguías viendo las cosas lejanas ''¿la universiadad, trabajar?, me quedan años luz todavía para eso'' y claro, una mu feliz sin esas responsabilidades.

1º de Bachillerato, ya te sientes algo más mayor, 16 años ya....uuuuuhhhh que mayooooooor, mi primer novio,  más cerca de la selectividad que era un trance muy importante porque era la puerta que se abría hacia la universidad. Tu estabas en el instituto que te comías el mundo porque te sentías de las más mayores y en realidad seguías siendo una niñata con pájaros en la cabeza. Los nervios que sentías cuando intentabas en el recreo salir fuera a desayunar y engañabas a la conserje con un carnet que no era tuyo, haciéndole creer que tenías los dieciocho años ya... (hasta que me pillaron y se me cortó to el rollo y encima me remordía la conciencia por haberle mentido) cosas de adolescentes. Pero seguías viendo las cosas lejanas aún. Todavía decías ''de aquí a que yo....'', ''tengo ganas de tener ya los veinte o los veinticuatro...que no van a llegar nunca''.

Pero llegas a la universidad. Ay la universidad....la mejor época de estudiante. Por fin has llegado y te sientes ya hiper mayor (y no dejas de ser una niñata, pero ya menos niñata, la verdad es que siempre he tenido la cabeza bastante bien puesta para la edad que tenía). Total, lo que comentaba antes, llegas a la universidad y las cosas que empiezas a decir es ''todavía me quedan tres años aquí...'' (pero en este sentido como queriendo que no se acabe nunca y que es mucho tiempo tres años...). Pues hala, cuando te das cuenta la has terminado ya... ¬¬ y encima ya para tercero de carrera me tuve que poner a trabajar (fue cuando empezó esta crisis de @·#~$%&?* de la que todavía no hemos salido....y de eso hace ya 5 años...). Tuve que dejar el conservatorio, trabajar, los veranos ya no se me hacían largos, responsabilidades, aguantar a gente estúpida y tener que callarte...Empiezas a añorar tu niñez y a decirte ''cuando era niña...'' PERO DA IGUAL! porque tenía veintidós años y te veías todavía con una vida por delante inmensa. Seguías con tus pájaros en la cabeza y pensando: ''cuando tenga los 24 años me sacaré las oposiciones (soy maestra), a los 27 me casaré y a los treinta y pocos pues empezaré a tener niños''.

Un "@#+`'¡º~#']^`'' pa mi gordo! Me veo con 26 años ya, así de repente. Me he presentado dos veces a las oposiciones y no ha habido suerte, tampoco tengo novio así que la idea del casamiento el año que viene se me va al traste también jajajaja y la de los hijos...(ahora mismo me repele esa idea), pero ves a mucha gente de tu edad ya independizándose, casándose, amigas tuyas teniendo hijos y viendo que el tiempo cada día pasa más y más rápido, ya estamos prácticamente en navidad y en verano decíamos ''Anda que no queda na pa navidad...'' pues ea, ya está aquí.

En fin, así es la vida. ¿Os pasa a vosotros lo mismo que a mi?. ¿Veis que el tiempo pasa a la velocidad de la luz? 

Nos vemos en el próximo sorbo ;).